Desde el año 2020, la incertidumbre global se convertiría en la nueva normalidad con la aparición de la enfermedad COVID-19 y los eventos que desataron la guerra en Ucrania. Estas problemáticas orillaron a las empresas y la industria a apoyarse en tecnologías emergentes para mantener la productividad y eficiencia en tiempos de crisis, tales como la inteligencia artificial y las redes de sensores inalámbricos.

Esta nueva realidad, sumada a las nuevas tendencias sociales, ha creado la necesidad de explorar la relación entre la inteligencia artificial y los seres humanos. El objetivo de esta investigación es reconocer cómo esta relación puede mantener los procesos industriales resilientes por medio del mantenimiento de maquinaria y activos físicos en tiempo real.

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