
A más de cuatro años del inicio de la pandemia, un estudio reciente advierte que la producción académica latinoamericana sobre comunicación y COVID-19 sigue centrada en describir fenómenos, pero no en proponer soluciones. La investigación, publicada en Journal of Science Communication ? América Latina, revisó 101 artículos de acceso abierto producidos entre marzo de 2020 y octubre de 2023 en Argentina y México.
Los resultados revelan un panorama disparejo: mientras México concentró la mayoría de los estudios sobre percepción pública, Argentina se enfocó en análisis de medios.
Sin embargo, en ambos países se detectan vacíos importantes, especialmente en el estudio de redes sociales, el consumo de información y el cruce entre comunicación y género.
?La mayoría de los trabajos fueron descriptivos. Faltan propuestas concretas que fortalezcan la respuesta ante futuras crisis sanitarias?, señalan las autoras del relevamiento, encabezado por la investigadora argentina Bárbara Burton.
El año 2022 fue el pico de publicaciones en ambos países: Argentina duplicó su producción respecto al año anterior, mientras México mantuvo un crecimiento sostenido. En total, se analizaron 59 artículos mexicanos y 42 argentinos, todos de libre acceso.
No obstante, el estudio advierte una tendencia a la dispersión temática. En México, más de un tercio de los trabajos abordó la percepción emocional y social frente al virus, mientras que en Argentina predominó el análisis del discurso mediático.
En contraste, los estudios sobre redes sociales ?claves durante la ?infodemia? de COVID-19? representaron apenas un 2% de la producción argentina y un 12% de la mexicana.
También llama la atención la escasa presencia del enfoque de género. Solo tres investigaciones argentinas abordaron la violencia doméstica en contexto de encierro, mientras que México no registró ninguna publicación sobre este tema.
De acuerdo con el análisis, el 93% de los estudios fueron empíricos, basados en recolección de datos. Sin embargo, solo un pequeño porcentaje fue propositivo, es decir, orientado a ofrecer soluciones. La gran mayoría se limitó a describir fenómenos comunicativos o mediáticos durante la crisis sanitaria.
Este hallazgo coincide con una preocupación ya expresada por la académica argentina Carolina Cortassa, quien advierte que la pandemia puso a prueba la capacidad de los sistemas de comunicación científica, pero también evidenció la falta de articulación entre la academia, los medios y los responsables de políticas públicas.
?La comunicación científica vivió un escenario ?barroco?, saturado de información, mensajes y plataformas?, escribió Cortassa, al referirse a la necesidad de repensar las mediaciones y no solo los medios.
Otro punto que destaca el relevamiento es la necesidad de metodologías híbridas que combinen lo cuantitativo y lo cualitativo. Las autoras subrayan que los estudios cualitativos dominaron la agenda, pese a que los desafíos contemporáneos requieren enfoques interdisciplinarios capaces de analizar la complejidad de los entornos digitales.
En ese sentido, los temas vinculados a la desinformación y las fake news sí lograron cierta relevancia: representaron el 19% de los artículos argentinos y el 12% de los mexicanos. No obstante, pocos de estos estudios profundizan en el papel específico que desempeñan las plataformas ?como X, Facebook o TikTok? en la propagación o contención de rumores.
El trabajo no solo mapea vacíos, sino que también propone caminos. Entre ellos, fortalecer el acceso abierto como política de conocimiento común, promover investigaciones con aplicación práctica y fomentar colaboraciones regionales que integren la comunicación en la gestión de riesgos sanitarios.
?Es necesario construir puentes entre el mundo académico y quienes diseñan políticas públicas. De lo contrario, los hallazgos quedan encerrados en los repositorios?, advierte el informe.
Finalmente, las autoras elaboraron una biblioteca digital con los 101 artículos analizados, disponible para investigadores, periodistas y tomadores de decisiones. El objetivo: que el conocimiento generado durante la crisis no se pierda ante la próxima.
Encuentre esta investigación y muchas más en el sitio de la Red Evaprop.
Artículo elaborado por el periodista Santiago Mora Rivas | santiago.morarivas@ucr.ac.cr