
El martes 10 de septiembre de este año, la Red temática para la Evaluación de procesos de gestión pública en pandemia y Participación ciudadana (Evaprop), del Programa Iberoamericano de Ciencia y Tecnología (CYTED), participó en las Jornadas de Investigación, Acción Social y Docencia de la Facultad de Ciencias Sociales de la Universidad de Costa Rica. La Red está formada por 8 países iberoamericanos (Argentina, Brasil, Chile, Colombia, Costa Rica, España, México y Panamá) y se encuentra en su tercer año de labores, año que centra su esfuerzo en el análisis de las dinámicas de participación ciudadana que se vivieron durante la pandemia por COVID-19, con un énfasis en ciberciudadanía, movimientos sociales y activismo digital.
Para su intervención en las Jornadas de Ciencias Sociales, el nodo de Costa Rica de Evaprop, mediante la presencia de 4 personas investigadoras del Centro de Investigación en Comunicación (CICOM) y del Centro de Investigación en Enfermedades Tropicales (CIET) de la UCR, tuvieron como objetivo reflexionar sobre los retos, aprendizajes y alcances del trabajo en red internacional y de la investigación comparada. La actividad tuvo transmisión en línea en el perfil de Facebook de la Facultad de Ciencias Sociales, el CICOM - UCR y la Red Evaprop.
Como parte del programa, la Dra. Margoth Mena-Young presentó la red y la evolución que han tenido en estos 3 años de intercambio regional, donde mostró los objetivos y los logros hasta el momento (línea de tiempo de Salud y CTI, libros editados y simposios realizados), disponibles en la web de Evaprop / CYTED.
Bajo una modalidad de conversatorio, el nodo abordó los retos de la soberanía científico-tecnológica de América Latina a partir de los casos de COVID-19 Technology Access Pool (C-TAP) en el marco de la diplomacia científica, tema a cargo de la Dra. Eugenia Corrales-Aguilar, y de los desarrollos científicos innovadores desde las universidades públicas, con los estudios en suero equino, elaboración de caretas 3D y fabricación de ventiladores, que abordó el MSc. José Luis Arce Sanabria. Estos temas dan cuenta de las dificultades y oportunidades alrededor de la negociación y consenso entre los gobiernos, y también entre estos y el sector privado, junto a los obstáculos estructurales que producen un avance menor al deseado y finalmente socavan el éxito esperado de una iniciativa científica.
La segunda ronda de la actividad abordó la gestión de la comunicación de riesgo en momentos de crisis mediante el análisis de campañas de comunicación para COVID-19 de Costa Rica y México a cargo de la MSc. Diana Acosta Salazar; de la comunicación de estrategias sobre salud mental en pandemia, a cargo del MSc. José Luis Arce; y de la divulgación de la ciencia realizada por personal científico en redes sociales con la experiencia de la Dra. Corrales-Aguilar. Este bloque mostró que la comunicación de riesgo debe contener conocimiento científico y evidencias pero además gestionar las emociones e incertidumbres de la población, e incluir un tejido de diferentes estrategias para llegar de manera efectiva a poblaciones con distintos consumos informacionales y experiencias. También quedó en evidencia el aporte -y la oportunidad- que significa la actividad del personal científico en redes sociales y medios, profesionales que atienden vacíos comunicacionales sobre temas complejos, y que cuentan con espacios de doble vía con la ciudadanía y con credibilidad para explicar aquello en lo que son expertos. Se hizo manifiesto también que la capacitación en comunicación de la ciencia es clave en el personal investigador.
En la parte final del evento, las personas expositoras contaron sus experiencias de crecimiento y aprendizaje mediante el intercambio en red: la mejor comprensión sobre fenómenos y experiencias vividas en otros países (y comparar con las propias); la flexibilidad para pensar en colectivo; la toma de decisiones desde la diversidad cultural, teórica, metodológica, disciplinar y de formas de trabajo; y el cómo todo ello nutre otras áreas de su desarrollo personal, profesional y académico. Destacaron además el intercambio con asistentes estudiantiles, jóvenes que también han crecido junto a la red.
En el espacio de intercambio con el público presente, se proyectó el trabajo del 2025 como un año para desarrollar un modelo de gestión de la comunicación y la información pública para crisis, y una oportunidad de implementar actividades formativas que apoyen el encadenamiento de los resultados y las reflexiones que la red ha producido.
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